El querer hacer y el deber hacer. Esa es la cuestión a dirimir. Muchas veces en la vida ante el primer obstáculo que se nos presenta. Dejamos de intentarlo. Pero, ¿Por que ocurre esto?. Por que muchas veces no tenemos confianza en nosotros mismos y en lo que somos capaces de lograr. Lo que genera una frustración y una sensación de vació, difícil de explicar. Es por eso que no debemos bajar los brazos y volver a intentarlo. Entendiendo que estos acontecimientos son parte nuestra vida y el comienzo de una nueva realidad que nos llama a ser diferentes y mejores.
Es por eso que: "Yo te ordeno, levántate y anda" - Del Evangelio, Lucas (5, 17-26).